viernes, 18 de noviembre de 2011

Concierto Ambigú, fotos


El niño demonio...
Por fin tenemos alguna foto del evento Ambigú para colgar. Menos mal que el Perro Mal Domao estuvo al tanto y nos sacó estas, que si no se nos queda el mejor concierto sin documentos. Como se nota que es el sexto zaraballo.
A ver si conseguimos más por ahí

miércoles, 2 de noviembre de 2011

Así da gusto

El viernes fue sin duda alguna el mejor concierto que hemos dado The Zaraballos
Una hora y media cojonuda arriba del escenario, y cuando te lo pasas bien arriba, la sensación rápidamente se extiende por todas partes.
El segundo concierto grande que hacíamos en casa desde aquella presentación en la Big Bottle, y parece que han pasado un millón de años, cuando no llega ni a siete meses de diferencia. Mucho más seguros (nunca se está del todo) y compactos, desde aquel hemos ensayado un millón de veces más, perfilando las canciones, sudando la camiseta.
Desde aquel marzo cuatro canciones originales (“Walking alone”, “Dead bird”, “Mountain man” e “Hypno buzz”) se han subido al directo, motivando la caída de casi todas las versiones. Lo que hay es nuestro, no más apoyos para rellenar tiempo.
Vale que el concierto en el Viña Rock fue un acercamiento bestial a la parte grande y profesional de este mundo, pero los escasos 25 minutos de aquella ocasión poco tienen que ver con toda una sala de un viejo amigo llena de gente que ha venido a verte, y a escuchar todo tu repertorio, un viernes noche a la hora que deben ser los conciertos, de once a doce.
Por eso sentimos que hemos llegado a una especie de primera etapa para The Zaraballos.
A partir de ahora vamos a intentar grabar las canciones cuanto antes, porque a la velocidad que se mueve esto seguro que en seguida llegan nuevos temas que necesitan atención y cada cosa lleva su tiempo. Por aquí os iremos contando cómo van las cosas.
Muchas gracias a Paco por contar con nosotros para la inauguración de su nuevo antro, el Ambigú;  gracias a Pedrón que estuvo toda la tarde cable va, cable viene, para intentar que el Ilex Rock saliera de manera aceptable (esto es, machacona y destroyer) hasta vuestros oídos; y como no, gracias a todos los que estuvisteis allí apoyándonos y disfrutando (esperamos) de la música.  Hace poco hemos tenido una experiencia un tanto “seca” y se hacía falta contar con público al pie del cañón. ¡Que sois cojonudos, vamos!